Los mercados bursátiles de Estados Unidos experimentaron caídas significativas el viernes, con el Dow Jones Industrial Average (Dow) sufriendo su peor desempeño diario en un mes, bajando más de 400 puntos. Esta caída se atribuyó en gran medida a las preocupaciones de los inversores por el anuncio del presidente Trump sobre posibles nuevos aranceles a las importaciones y el aumento de las expectativas de inflación. El S&P 500 y el Nasdaq Composite, de gran peso tecnológico, también vieron pérdidas considerables, cerrando con una baja de casi el 1% y el 1.4% respectivamente, marcando su segunda semana consecutiva de declive.
Los comentarios del presidente Trump durante una reunión con el primer ministro japonés, Shinzo Abe, alimentaron la ansiedad del mercado. Indicó planes para revelar aranceles recíprocos sobre las importaciones estadounidenses y sugirió que los aranceles sobre Japón también eran una posibilidad. Estas declaraciones exacerbaron las preocupaciones existentes sobre la escalada de las tensiones comerciales y su posible impacto negativo en el crecimiento económico mundial.
La confianza del consumidor se desplomó a un mínimo de siete meses a principios de febrero, incumpliendo las expectativas. Las expectativas de inflación aumentaron a su nivel más alto desde noviembre de 2023, impulsadas por las preocupaciones en torno a los aranceles amenazados. Este aumento en las expectativas de inflación contribuyó al sentimiento negativo del mercado, ya que los inversores lidiaron con la posibilidad de precios más altos y una reducción del gasto del consumidor.
La encuesta de consumidores de la Universidad de Michigan reveló que los estadounidenses ahora anticipan una tasa de inflación del 4.3% durante el próximo año, un aumento de un punto porcentual completo con respecto al mes anterior. Esta mayor expectativa de inflación contribuyó aún más a la inquietud del mercado. En respuesta a los datos de inflación y al informe mensual de empleos, el rendimiento del Tesoro a 10 años subió a un máximo de sesión del 4.5%.
Si bien el informe de empleos de enero indicó la adición de 143,000 empleos, sin alcanzar las previsiones de los economistas, aún sugería un mercado laboral resistente. La tasa de desempleo bajó al 4.0% desde el 4.1% de diciembre. Sin embargo, los aspectos positivos del informe de empleos se vieron eclipsados por las preocupaciones predominantes sobre los aranceles y la inflación.
Además de la caída del mercado, el precio de las acciones de Amazon cayó un 4% después de que el gigante del comercio electrónico, junto con Google y otras importantes empresas tecnológicas centradas en la inteligencia artificial, emitieran perspectivas de ingresos decepcionantes. Esto alimentó preocupaciones más amplias sobre el desempeño del sector tecnológico y su impacto en el rendimiento general del mercado. La confluencia de noticias negativas, incluidas las amenazas arancelarias, el aumento de las expectativas de inflación y las decepcionantes ganancias corporativas, creó una tormenta perfecta para los mercados, lo que llevó a la caída sustancial del Dow y otros índices importantes.